Consideraciones para el tratamiento de la vejiga hiperactiva con Botox®

NIVEL: INTERMEDIO

Vejiga hiperactiva

La hiperactividad del detrusor neurogénico que caracteriza al síndrome de vejiga hiperactiva, puede resultar en complicaciones del tracto urinario inferior y superior, e incluso, eventualmente, en insuficiencia renal terminal. Ya que la alta presión en la vejiga es el principal factor detrás de estos problemas de salud, manejar y reducir esta presión puede mejorar significativamente tanto la calidad de vida como la expectativa de vida de los pacientes.1

Botox®,  ha demostrado su eficacia para reducir la presión intravesical y disminuir los episodios de incontinencia, lo cual mejora la calidad de vida de quienes padecen de VH.1,6

En este artículo le ofrecemos algunas consideraciones que se deben tomar en cuenta al iniciar el tratamiento con Botox® .⁶

Botox® es la alternativa

La terapia anticolinérgica generalmente se considera el tratamiento de primera línea para la vejiga hiperactiva y los síntomas de almacenamiento. En metaanálisis1, los anticolinérgicos reducen la presión intravesical y los episodios de incontinencia, y aumentan el volumen de la vejiga. Los principales efectos secundarios de la terapia anticolinérgica son la boca seca y el estreñimiento. Cuando la terapia anticolinérgica es insuficiente o viene acompañada de diversos efectos secundarios, se recomiendan inyecciones intradetrusoras  o intramusculares con Botox®.1

Recomendaciones antes de iniciar el tratamiento:

*Tener en cuenta las contraindicaciones para el tratamiento de vejiga hiperactiva6

Confirme que no exista infección urinaria

  • Determine la profilaxis que debe seguir según los hallazgos del cultivo de orina.1

  • Administre antibióticos (excepto aminoglucósidos). Inicie desde 1-3 días antes hasta 1-3 días después de la inyección.2

  • Botox® está contraindicado en casos de infección urinaria.1,3

Asegure la función plaquetaria2

  • Si el paciente está tomando anticoagulantes, debe suspenderlos 3 días antes de la inyección.2

  • La inyección de Botox® conlleva el mismo riesgo de sangrado que una biopsia.4

  • Si no ocurre sangrado, el tratamiento anticoagulante se puede reanudar de inmediato.4

Anticípese al riesgo de retención2

  • Informe al paciente sobre el autocateterismo intermitente limpio en caso de retención urinaria.2

  • Mida el residuo post-miccional cada 2 semanas, durante 12 semanas,3 y esté alerta a volúmenes >200 ml.

  • El autocateterismo es apropiado para los pacientes que reportan micción retardada, débil, intermitente o trabajosa.5

Botox® es un producto que ofrece menos riesgo y más satisfacción para el paciente2-6.

[1] Weckx F, Tutolo M, De Ridder D, Van der Aa F. The role of botulinum toxin A in treating neurogenic bladder. Transl Androl Urol. 2016;5(1):63-71. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4739988/

[2] Botox® (OnabotulinumtoxinA). Guía de equipo y procedimiento.

[3] Jambusaria L, Dmochowski R. Intradetrusor onabotulinumtoxinA for overactive bladder. Expert Opin Biol Ther. 2014;14(5):721-7.

[4] Hermieu J, Ballanger P, Amarenco G, Chartier-Kastler E et al. Recommandations pour l’utilisation de la toxine botulinique de type A (Botox®) dans l’hyperactivité vésicale réfractaire idiopathique. Prog Urol. 2013;23(17):1457-63.

[5] Collins L, Sathiananthamoorthy S, Fader M, alone-Lee J. Intermittent catheterisation after botulinum toxin injections: the time to reassess our practice. Int Urogynecol J. 2017;28.

[6] Información para prescribir actualmente aprobada para el producto Botox® https://www.abbvie.com.co/content/dam/abbvie-dotcom/co/Products/Botox100u/INSColombia.pdf

CO-BUO-240018